Diálogo: con la pistola en la cabeza
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Letras del Pueblo
Rogger Daza
Fotos Rogger daza para NotiyaraDigital.com
Venimos haciendo seguimiento al proceso de diálogo entre la oposición y el gobierno que se adelanta en Venezuela. Hemos dicho que la mediación del Papa Francisco no solo lograría sentar a las partes sino que daría una nueva dinámica positiva a la mesa de negociación por su calificada autoridad moral y capacidad de concertación en la resolución de conflictos. La verdad es que la dirigencia opositora estaba en conocimiento de las reuniones preparatorias entre la MUD y el gobierno. Es falso e hipócrita eso de que se enteraron por televisión de una mesa de diálogo donde El Vaticano empezaría a jugar un papel estelar, lo que sí creo fue para la oposición una sorpresa fue el hecho de que el presidente Nicolás Maduro fuese en persona a la Santa Sede y en entrevista con el Papa aceptara la mediación oficial, porque en mi opinión, a pesar de que fue la oposición quien solicitó la mediación del Vaticano, nunca imaginaron que el gobierno aceptaría, es decir, solicitaron la mediación del Sumo Pontífice haciendo el cálculo político de que el gobierno nunca accedería a la participación de la Iglesia Católica, demostrando que no existe una sincera vocación al diálogo por parte de la dirigencia opositora. Por esta razón, entre otras, han quedado entrampados ante la autoridad política internacional del Papa y buscan las excusas más burdas para patear la mesa, obvio de la mejor forma, sin asumir ningún costo político ante la presencia del Vaticano y la opinión internacional. Por otro lado, el gobierno asume la mesa de dialogo con responsabilidad y muestra su voluntad de considerar revisar temas como los mal llamados “presos políticos” y facilita las condiciones para liberar a varios de ellos, entre los que se encuentra Carlos Melo, dando muestras de desprendimiento y pruebas concretas de voluntad. Ahora la postura irracional de algunos dirigentes como Henrique Capriles deja claro que no tiene intenciones de dialogar, no creen en la negociación y el acuerdo como herramienta fundamental de los sistemas democráticos, y como fariseos hipócritas, están buscando torpedear hasta acabar con el proceso mismo, porque eso de dar ultimátum al gobierno y chantajear poniendo plazo de 10 días para convocar a elecciones generales es colocarle una pistola en la cabeza al dialogo para disparar en cualquier momento, porque yo pregunto, queridos lectores ¿será que con la salida del presidente Maduro se van a resolver los problemas del país como por arte de magia? Comparto la opinión y posición seria del gobernador de Lara, Henry Falcón, cuando dice que el dialogo se debe asumir colocando los intereses del país por delante y no las aspiraciones políticas personales de una individualidad o de un sector “el dialogo no es para salvar a un gobierno, sino para salvar un país”. Así ha sentenciado enfáticamente Falcón las pretensiones de sectores de la MUD que quieren torpedear el dialogo. En suma, el diálogo es un proceso de negociación y acuerdo que requiere racionalidad y altura política, el dialogo no acepta chantajes ni ultimátum, y menos una pistola con fecha para disparar, como pretendían hacer con la marcha del 3 de noviembre.