Paro universitario frena los nuevos ingresos
17.07.2013 13:04
Autoridades de la Universidad de Carabobo exhortarán hoy a los docentes a reanudar actividades. En la UCV, 46 escuelas deberán reprogramar el semestre
Las casas de estudios, en paro académico desde el 30 de mayo, se debaten entre la inmediata reprogramación del semestre y la espera de que el conflicto finalice para tomar decisiones sobre el futuro de las clases.
Esta semana, cuando aún prosiguen las negociaciones con el Ministerio de Educación Universitaria, es decisiva para una posible restructuración del calendario académico. La oportunidad de salvar el semestre se asomó el 8 de julio, cuando el ministro Pedro Calzadilla aceptó dialogar con Fapuv y con los estudiantes. Sin embargo, los resultados infructuosos de las mesas de discusión, instaladas el jueves 11, echaron por la borda la certidumbre sobre el futuro académico.
La UCV es, quizás, la más afectada por la radicalización del conflicto. Aun cuando dos facultades (Agronomía y Arquitectura) y una escuela (Derecho) lograron culminar el semestre y el año con normalidad, las nueve facultades restantes requieren por lo menos ocho semanas para cerrar el período. De acuerdo con el secretario general de la UCV, Amalio Belmonte, la Facultad de Humanidades y Educación está en una situación delicada por la diversidad y número de escuelas que la integran.
“Si no logramos utilizar alguna semana de julio para darle continuidad a las actividades, será muy difícil una reprogramación que nos permita culminar el semestre y comenzar el otro con la mayor normalidad”, afirmó Belmonte.
De prolongarse el conflicto durante las dos últimas semanas de julio, el final del semestre que quedó suspendido coincidiría con la incorporación de los nuevos alumnos. “En la UCV tenemos problemas con la planta de docentes, con los laboratorios. No tenemos capacidad para afrontar esa situación”, advirtió. Eso supondrá, entonces, el aplazamiento del comienzo del semestre 2013-2014 y del ingreso de la nueva cohorte.
Los decanos de las facultades de LUZ desarrollaron planes que les permitirán salvar el semestre y el año, siempre y cuando el conflicto culmine esta semana. En agosto se dictarán los cursos vacacionales, los regímenes semestrales continuarán las clases en septiembre y los anuales terminarán un mes después del previsto.
“Luego se dictará un semestre intensivo, que en vez de 14 semanas duraría 10, para que los estudiantes puedan cursar los 2 periodos académicos de este año”, detalló la vicerrectora académica de LUZ, Yudith Aular.
El Consejo Universitario de la Universidad de Carabobo exhortará hoy a los profesores a reanudar las actividades de inmediato, informó el vicerrector académico Ulises Rojas.
La UC espera retomar las actividades el 15 de septiembre. Mientras algunas carreras culminarían el período en menos de un mes, otras, como Derecho, terminaría el año académico a finales de este mes.
En todo caso, la mayoría de las carreras en la UC no sobrepasan las 10 semanas de clases vistas, de las 16 o 18 semanas que dura cada período académico.
En la USB, el secretario general, Cristian Puig, señaló que este trimestre se suspenderá el 19 de julio y se retomara el 16 de septiembre, para culminar el 18 de octubre.
La USB acordó con los profesores que dictarán los cursos intensivos de verano, con el fin de que los alumnos puedan adelantar materias.
Evalúan posibles escenarios
En la UCLA y UPEL, las autoridades evalúan los alcances del conflicto.
En la ULA aún no se ha discutido la posibilidad de reprogramar el semestre. “Algunas facultades acababan de terminarlo cuando empezó el paro. Otras quedaron por la mitad. De todas formas no constituye un problema para nosotros porque cada facultad comienza en la oportunidad que le corresponda”, explicó el rector Mario Bonucci.
Débora Velásquez, presidenta de la Asociación de Profesores de la UCLA, precisó que los docentes aprobaron ayer la suspensión de los cursos intensivos de agosto. No se ha discutido una posible reprogramación.
Tampoco se ha analizado ese asunto en la UPEL, donde estudian los escenarios posibles de reprogramación.
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Foto: Cortesía EN
Las casas de estudios, en paro académico desde el 30 de mayo, se debaten entre la inmediata reprogramación del semestre y la espera de que el conflicto finalice para tomar decisiones sobre el futuro de las clases.
Esta semana, cuando aún prosiguen las negociaciones con el Ministerio de Educación Universitaria, es decisiva para una posible restructuración del calendario académico. La oportunidad de salvar el semestre se asomó el 8 de julio, cuando el ministro Pedro Calzadilla aceptó dialogar con Fapuv y con los estudiantes. Sin embargo, los resultados infructuosos de las mesas de discusión, instaladas el jueves 11, echaron por la borda la certidumbre sobre el futuro académico.
La UCV es, quizás, la más afectada por la radicalización del conflicto. Aun cuando dos facultades (Agronomía y Arquitectura) y una escuela (Derecho) lograron culminar el semestre y el año con normalidad, las nueve facultades restantes requieren por lo menos ocho semanas para cerrar el período. De acuerdo con el secretario general de la UCV, Amalio Belmonte, la Facultad de Humanidades y Educación está en una situación delicada por la diversidad y número de escuelas que la integran.
“Si no logramos utilizar alguna semana de julio para darle continuidad a las actividades, será muy difícil una reprogramación que nos permita culminar el semestre y comenzar el otro con la mayor normalidad”, afirmó Belmonte.
De prolongarse el conflicto durante las dos últimas semanas de julio, el final del semestre que quedó suspendido coincidiría con la incorporación de los nuevos alumnos. “En la UCV tenemos problemas con la planta de docentes, con los laboratorios. No tenemos capacidad para afrontar esa situación”, advirtió. Eso supondrá, entonces, el aplazamiento del comienzo del semestre 2013-2014 y del ingreso de la nueva cohorte.
Los decanos de las facultades de LUZ desarrollaron planes que les permitirán salvar el semestre y el año, siempre y cuando el conflicto culmine esta semana. En agosto se dictarán los cursos vacacionales, los regímenes semestrales continuarán las clases en septiembre y los anuales terminarán un mes después del previsto.
“Luego se dictará un semestre intensivo, que en vez de 14 semanas duraría 10, para que los estudiantes puedan cursar los 2 periodos académicos de este año”, detalló la vicerrectora académica de LUZ, Yudith Aular.
El Consejo Universitario de la Universidad de Carabobo exhortará hoy a los profesores a reanudar las actividades de inmediato, informó el vicerrector académico Ulises Rojas.
La UC espera retomar las actividades el 15 de septiembre. Mientras algunas carreras culminarían el período en menos de un mes, otras, como Derecho, terminaría el año académico a finales de este mes.
En todo caso, la mayoría de las carreras en la UC no sobrepasan las 10 semanas de clases vistas, de las 16 o 18 semanas que dura cada período académico.
En la USB, el secretario general, Cristian Puig, señaló que este trimestre se suspenderá el 19 de julio y se retomara el 16 de septiembre, para culminar el 18 de octubre.
La USB acordó con los profesores que dictarán los cursos intensivos de verano, con el fin de que los alumnos puedan adelantar materias.
Evalúan posibles escenarios
En la UCLA y UPEL, las autoridades evalúan los alcances del conflicto.
En la ULA aún no se ha discutido la posibilidad de reprogramar el semestre. “Algunas facultades acababan de terminarlo cuando empezó el paro. Otras quedaron por la mitad. De todas formas no constituye un problema para nosotros porque cada facultad comienza en la oportunidad que le corresponda”, explicó el rector Mario Bonucci.
Débora Velásquez, presidenta de la Asociación de Profesores de la UCLA, precisó que los docentes aprobaron ayer la suspensión de los cursos intensivos de agosto. No se ha discutido una posible reprogramación.
Tampoco se ha analizado ese asunto en la UPEL, donde estudian los escenarios posibles de reprogramación.
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