Al recibir el informe forense aún podía notarse la sangre que brotaba de su cabeza. Sufrió politraumatismos también en el tórax, rostro, cuello, brazos y piernas.
Según relató, el lunes que era feriado por el Día del Trabajador, acudió a un compartir con sus amigos. Estaba en casa de su hermano y de allí decidió ir a casa de su novia, ya habían pasado las 12:00 AM. Aseguró que luego del ataque se percató de la «imprudencia» que cometió por transitar dicho bulevar tan tarde.
Dijo que cuando caminaba cerca del edificio Banco Metropolitano, se sorprendió al ver a una adolescente con una edad estimada entre 13 y 14 años. Luego se le acercó un niño de aproximadamente ocho años y cuando este aceleró el paso se vio rodeado de otros infantes más, quienes se le lanzaron encima.
Lo despojaron de su teléfono, billetera y pasaporte, tal y como lo declaró ante el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), para validar que ya no poseía sus documentos y teléfono.
En medio de la consternación que le produjo el ataque de parte de este grupo de niños, pidió a las autoridades mayor seguridad durante las noches en esta zona del municipio Libertador. «La calle es del ciudadano no del delincuente, el delincuente debe estar en las cárceles», concluyó.
Fuente: El Pitazo