Los uniformados recibieron una llamada telefónica en la cual les comunicaron que supuestamente una madre tenía amarrado en el patio de su casa a su primogénito menor de edad. Inmediatamente los agentes se trasladaron a la dirección indicada por el informante para constatar la veracidad de los hechos y de la denuncia
Al llegar a la residencia ubicada en la comunidad Hilanderías, los oficiales interrogaron a la agresora, quien reconoció que sí había atado al infante por un “corto tiempo”.
Tras la confesión, la mujer fue aprehendida y trasladada al comando policial donde fue reseñada y puesta a la orden de la Fiscalía Sexta del Ministerio Público.