ONCE CLAVES PARA NO GRITARLES A TUS HIJOS

Cada día son más los padres que apuestas a la disciplina con amor a la comunicación asertiva y las caricias como medida para disipar situaciones difíciles. Pero como todo ser humano a veces las situaciones diarias pueden disminuir la paciencia y hacer de un momento una situación compleja donde los gritos se apoderan del espacio.

Cómo aplicar una efectiva crianza con amor es la receta que todo padre desea tener.  Aunque cada circunstancia es diferente y cada familia tiene una realidad que la diferencia de otra.

 “Cada día son La incógnita más grande en esto de la disciplina positiva no es el por qué aplicarla, sino cómo hacerlo. Muchos padres desean tener un modelo de interacción más sano con sus hijos pero no tienen las herramientas para llevarlo a cabo”, detalló la psicóloga.

La psicóloga Vanessa Muñoz, precisa algunas claves para no gritarles a los hijos

1 Haz público tu compromiso, comparte con los demás tu determinación de no gritar. Nuestros hijos nos sirven como reguladores, si te excedes, de seguro te lo dirán.

2 Examínate y conócete, saber cuáles son las situaciones que más nos estresan y nos hacen salir de control nos da el poder para manejarlas de forma conveniente, para delegar incluso.

3 Más allá del autoconocimiento está la acción y al ser espejo de nuestros hijos debemos empezar a proyectar las emociones de manera sana para que ellos lo hagan también.

4 Haz una lista de los comportamientos de tus hijos que te hacen gritar y escribe las soluciones alternas. Tenerlas por anticipado hace que nos sintamos menos tentados a vociferar.

5 Separa la "mala conducta" de los comportamientos típicos de los niños. En ocasiones tenemos que volver a lo que es "normal" en cada etapa evolutiva.

6 Si te enfadas por algo, no lo mezcles con otro evento. Eso hace que escalemos, nos irritemos más y terminemos gritando.

7 Mira el gritar como una elección consciente. Detente 3 segundos y pregúntate si vale la pena molestarte... la mayoría de las veces verás que no.

8 Ser empático y ponerse en los zapatos de tus hijos hacen que nuestro autocontrol se dispare porque amplia nuestra comprensión. Muéstrate cercano y oye las explicaciones que te dan antes de actuar.

9 Promueve el respeto como premisa en la relación. Si prima este valor, los gritos están de más. Los papás también necesitamos un Time Out. Si estás molesto PARA antes de gritar, vete a un lugar calmado, respira y date cuenta de tus sentimientos. Cuando la tormenta pase vuelve a resolver el problema.

10 Si te equivocas, pide disculpas. Errar es de humanos y este camino de la disciplina positiva requiere determinación, firmeza y valentía.

11 Pide ayuda si sientes que no puedes manejar la situación. Apóyate en tu pareja o familia.