UNEY y UNERG graduaron III cohorte del diplomado de cronistas Gilberto Antolínez
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Fotos de Prensa UNEY para Notiyaradigital.com
En el marco de la celebración de la XLII Convención Nacional de Cronistas Oficiales de Venezuela, la Universidad Nacional Experimental del Yaracuy (UNEY) en alianza con la Universidad Nacional Experimental Rómulo Gallegos (UNERG), efectuó el acto de grado de la III cohorte de su diplomado para la formación de cronistas “Gilberto Antolínez”.
15 nuevos cronistas formados en este plan de estudios único en el país, recibieron sus diplomas de manos del vicerrector de la UNEY, Manuel Milla, la vicerrectora de la UNERG, Evelin Fernández, el coordinador adjunto del diplomado y cronista de San Felipe, Raúl Freytez, la coordinadora de extensión, investigación y educación continua de la UNEY, Alba González, el docente Rafael Strauss, el presidente de la Asociación Nacional de Cronistas Oficiales de Venezuela (ANCOV), José Alberto Pérez Larrarte, y la cronista del municipio Peña, Belky Montilla.
Milla manifestó estar muy complacido de que a pesar de producirse una pausa en el diplomado por causas ajenas a la voluntad de las autoridades de la UNEY, se logró llegar con éxito al final del camino de esta III cohorte, gracias a la alianza estratégica con la UNERG. “Esta graduación pone evidencia el hecho de que la interinstitucionalidad rinde frutos, coadyuva con esfuerzos para el logro de los objetivos, no sólo en el área educativa, sino en cualquier área del conocimiento y del quehacer cotidiano. Esto ha permitido, no sólo salir adelante y cumplir en lo personal con cada uno de los integrantes del diplomado Gilberto Antolínez, sino también la revisión del programa del diplomado para su fortalecimiento en la formación de cronistas.” El vicerrector agregó que la solidez alcanzada por el diplomado y su espíritu de llevar adelante la memoria histórica de las ciudades y pueblos, han servido de plataforma a las dos universidades para concretar la maestría en Historia, cuya fecha será anunciada próximamente.
Por su parte, la vicerrectora de la UNERG, también celebró este éxito conjunto entre dos universidades hermanas, alentando a los nuevos cronistas a destacarse no sólo por el oficio en ciudades, caseríos y pueblos, sino en todos los espacios, desde la familia, las instituciones, escribiendo todo lo que ven y sienten, como registro y documento. “Como docente universitaria llegué a este diplomado con una estructura rígida, que luego deseché para abrirle paso a la creatividad y la vivencia, como herramientas para contar las memorias de los pueblos”, expresó Fernández.
El graduando representante de la III cohorte, Tobías Salazar, agradeció a las dos universidades y sus docentes por el afán de instruirlos y sembrarles la semilla de ser cronistas, motivando a sus compañeros a perpetuar este oficio. “No existe pueblo pequeño, por pequeño que sea tiene memoria, y la memoria no tiene más límite que ella misma. Todo pueblo ha aprendido a extraer de la memoria los eventos y acontecimientos que el paso del hombre ha dejado en esta tierra. En este diplomado, nosotros aprendimos a hacerlo.”
Defensores y protagonistas de la historia
La organización de la Convención, a cargo del cronista de San Felipe, Raúl Freytez, preparó dos conferencias especiales dedicadas a los graduandos: El papel de cronista en Venezuela, a cargo de Wilfredo Bolívar, cronista de Araure, archivero y expresidente de Ancov; y Metodología para la redimensión de la memoria histórica, con Uziel Gutiérrez de la Isla, cronista de la Universidad de Zacatecas, México.
Bolívar comenzó hablando de la historia de los cronistas en el mundo, así como de los diversos roles y legislaciones que han tenido los cronistas en Venezuela. Felicitó a la UNEY por llevar a cabo este programa de estudios y los incitó a continuar el camino de la formación. Destacó que en la actualidad, el cronista no sólo se ocupa de resguardar la memoria preservando el pasado, sino también el presente y que está en capacidad, por ejemplo de parar una obra que atente contra un patrimonio.
Insistió en recalcar que el estado venezolano debe convencerse de que el cronista no es sólo un funcionario, sino que debe ser un defensor y protagonista de la historia con voz viva y activa. “El reflejo de los cronistas en Venezuela es la imagen que transmitamos de nuestros municipios. De nuestro accionar individual y ética depende el rumbo de la Asociación fundada en 1968”, señaló antes de recordar la frase de Pedro Francisco Lizardo con la que culminó: “Sin los cronistas las ciudades se quedarían huérfanas irremediablemente.”
Gutiérrez de la Isla indicó que es la segunda vez que visita San Felipe por el diplomado Gilberto Antolínez y recordó algunas funciones que tiene un cronista: un investigador, un conocedor de la historia, un analítico del pasado, que con honorabilidad y conocimiento investiga y divulga la historia pasada, pero también para rescata, elabora y difunde la historia actual de su entorno. “Pocos cronistas tienen formación académica, por eso se hacen las investigaciones de manera muy empírica y con especialidad en el relato, iniciados en el trabajo cotidiano de hacer historia, con fuentes documentales y también enfocados en hacer crónica del presente.” Por eso instó a la UNEY a continuar con este diplomado, recordando a sus cronistas que aquel que no publica frecuentemente en periódicos, radios o la web, está anulado, a la vez que animó a ANCOV a crear anuarios, calendarios de efemérides y documentos fedatarios.
Cortesía de Prensa UNEY /Educación